A Gaby, porque quiero verte reír.
Y a Santiago Roncagliolo, por Abril rojo.
D.
—Me leí el libro.
—¿Te gustó?
—Mucho, sobre todo la dedicatoria.
—Esa también es mi parte favorita.
—Yo te dije eso mismo una vez.
—¿Qué cosa?
—Que yo soy de donde tú estés.
D.
Ella le sonrió y empezó a correr. Cuando completó cien metros, detuvo el paso y se volteó.
D.
—¿Y entonces?
—Quería darte ventaja —dijo él.
D.
Y la persiguió por siempre hasta el confín.
5 comentarios:
chama. GUAO. Tu misma rompes tus récords.
te amo, revisa mi blog
Mi DEB!!!! Demasiado hermoso... Gracias... Espero reir siempre juntas... Te quiero Muchisismo!
Donde estan estos hombres fantasticos?? Porque al parecer la migra miamera se los llevo a todos!
¡Jajajajajajajaja! Yo tampoco sé dónde están... Esto es pura ficción. Así que por el momento sólo existen en mi imaginación...
Tal vez esa es una de las razones de tener un blog! Dejar por escrito esos hombres fantasticos que habitan nuestras cabezas ilusas! jajajaja
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